martes, 7 de julio de 2009

Aprendiz de pirata.


Casi siempre ilusión, y algunas veces,
realidad navegadas por tus aguas.
Al forjar mi carácter fuiste fragua
y seres mitológicos tus peces.
.
Mi padre el capitán y yo el grumete,
arribando a tu isla, que hoy me observa
desde la oscuridad, y que conserva
la esencia del tesoro que aún promete.

Se escribió mi destino en tus barquillas,
que marcaron mi infancia marinera,
rompiendo tus espejos con sus quillas.
.
Nunca nadie mejor patrón tuviera
que aquél que me acercaba a tus orillas
canturreando unas rimas milongueras.


A mi padre, que me inició en los secretos de la navegación y de la poesía.

2 comentarios:

  1. Marce, entrañable y sentimental recuerdo. Bonito soneto.

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  2. Si quitases tantas linea en blanco te quedaria más estético.
    Muy bonito, para septiembre te prometo uno relacionado con el tema.
    En el contador de silabas, hasta los de Manolo fallan asi que no hay por qué ser tan exigentes.

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