sábado, 26 de septiembre de 2009

Con cariño, para tu sobrino Dioni y la encantadora galleguiña.

Gran parte de la felicidad, a la que todos aspiramos, aunque parezca una cursilería o un tópico, tiene mucho que ver con el amor. Porque todos nosotros necesitamos amor, el cual forma parte de la naturaleza humanan, tanto como comer, beber y dormir.

Y compartir y caminar juntos.

Y que, cuando transcurran los años, podáis deciros, asidos de la mano y mirándoos a los ojos, lo que expresa Benedetti en este poema:

TODAVIA

No lo creo todavía,
estás llegando a mi lado
y la noche es un puñado
de estrellas y de alegría

palpo, gusto, escucho y veo
tu rostro, tu paso largo,
tus manos y sin embargo
todavía no lo creo;

tu regreso tiene tanto
que ver contigo y conmigo
que por cábala lo digo
y por las dudas lo canto

nadie nunca te reemplaza
y las cosas más triviales
se vuelven fundamentales
porque estás llegando a casa;

sin embargo todavía
dudo de esta buena suerte,
porque el cielo de tenerte
me parece fantasía;

pero venís y es seguro,
y venís con tu mirada,
y por eso tu llegada
hace mágico el futuro;

y aunque no siempre he entendido
mis culpas y mis fracasos,
en cambio, sé que en tus brazos
el mundo tiene sentido;

y si beso la osadía
y el misterio de tus labios,
no habrá dudas ni resabios
te querré más
todavía.

Mario Benedetti

1 comentario:

  1. Muchas gracias, seguro que a mis sobrinos les encantará esta poesía tan bien traída.
    Y gracias en su nombre por tus buenos deseos.

    ResponderEliminar

Seguidores